lunes, diciembre 13, 2010

Lectus Habemus


Ayer fuimos al Alto Las Condes con el gringo a comprar cama. Ya le habíamos echado el ojo a una Rosen modelo Uno.5 con combo completo igualito al que sale en la foto (respaldo, veladores, plumón, sábanas y almohadas), así es que él se decidió y soltó el billetín, je, je, je.

¡¡¡Tenemos cama!!!

Estoy tan contenta, apenas lo puedo creer, esta es la primera compra grande para nuestra futura casa.

Después de la flamante adquisición, nos miramos con el gringo y nos abrazamos como un minuto completo en la mitad de la tienda con los vinos y cervezas del último piso como testigos ¡Qué freak!

Este es un gran paso como pareja, pero también como individuos, porque, después de todo, cada uno dejará la casa paterna para irse a la aventura de construir una nueva familia. Lo que no es menor.

Y así nos cambia la vida... pensar que todo empezó con una cama.

No hay comentarios: